Indudablemente, el tequila es la bebida clásico más especial en México, y nada superior que un caballete acompañado de su sal y limón, pero aquí te contamos otras maneras de tomarlo.
1. Tequila Oro. Una onza de tequila, 3/4 de onza de jugo de limón y una cucharada de miel.
Agua mineral
El agua mineral se encuentra dentro de las bebidas preferidas para combinar con tequila. Le da a la bebida una efervescencia fría. Bastante tequila blanco, jugo de limón fresco y agua con gas para conseguir Ranch Water. Para todos los que procuran una bebida carbonatada algo mucho más amarga, el agua tónica es buena opción para entremezclarla con tequila.
Si te agradan los sabores cítricos y levemente amargos, puedes evaluar el tequila con refresco de naranja. Entre los cócteles populares que poseen los dos elementos es Coloma, que asimismo añade un toque de jugo de limón.
Sagnata
Si bien el nombre de este coctel puede ser tomado como diminutivo de sangre; este licor de color colorado que acompaña al caballete de tequila, logra una especial armonía. Se compone de jugo de tomate, jugo de naranja, jugo de limón, salsa picante, salsa inglesa y sal. Se estima que el origen de esta preparación está en Jalisco.
Tequila, jugo de naranja y limón, son los elementos base de este coctel mexicano. Si bien la margarita es el coctel con tequila mucho más habitual; la paloma es consumida de forma local en el país; a fin de que los elementos antes nombrados, armonicen perfectamente. Se sirve con una rodaja de limón o naranja, como garnitura.
Coctel Dorado, para el calor
Siguiendo con las proposiciones de cócteles con tequila te aconsejamos este con la etiqueta Mestre Dobel Diamant.
Requieres 1 onza de Profesor Dobel Diamante, 1/2 vaso de jugo de limón, 1 cucharada de miel. De qué manera llevarlo a cabo: Se mezcla todo y se consigue el despacio, pero al unísono profundo gusto de la maestría.
Elementos
- 50cc de tequila
- cien cc de jugo de naranja
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Mezcla el tequila, el jugo de naranja y el hielo picado en una coctelera. Colar sobre un vaso prominente y añadir los cubos de hielo hasta atestar el vaso prácticamente completamente. Vuelca de forma rápida la granadina, a fin de que caiga en el fondo del vaso y suba de manera lenta (de esta forma se logra este efecto de amanecer). Adorna con la rodaja de limón, la guinda y una paja para eliminar.
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