Tomar alcohol como una copa de vino o una cerveza antes de acostarse puede parecer una enorme iniciativa para reposar mejor. Si tuviste un día muy pesado o si hace calor, indudablemente estas bebidas van a mejorar tu ánimo e inclusive te provocarán un sopor muy divertido que va a hacer que se vayas con una sonrisa en cama.
El alcohol, ciertamente, asiste para conciliar mucho más veloz el sueño, pero esta práctica tiene múltiples problemas. Lo esencial es que altera los ritmos circadianos de tu cuerpo. Estos ritmos de 24 h se rigen por un reloj biológico profesor, una pequeña zona del cerebro que tiene un enorme trabajo: coordinar las hormonas y las ocupaciones de todo tu cuerpo. Desde el metabolismo y el sistema inmunológico hasta la energía, el impulso sexual, las funcionalidades cognitivas y el estado anímico son controlados por ese sistema.
2 Contribuye a reposar bien
¡Su tequilleta ahora reposar!, ¡Si padeces de insomnio un caballo de tequila te va a ayudar a dejarlo el sueño mucho más veloz.
Provecho de tomar tequila: el orgullo de México
Pueblo de Tequila Jalisco (Fotografía: Getty Images)
A los mexicanos nos distinguen todos y cada uno de los sabores habituales que entendemos elaborar, y no solo hablamos a los pasmantes platillos que contamos el lujo de alardear.
¿De qué forma se llegó a esta conclusión?
Para investigar los efectos del alcohol antes de reposar, los científicos hicieron electroencefalogramas con los que midieron la actividad cerebral a lo largo del sueño en personas de entre 18 y 21 años que habían tomado alcohol (prácticamente medio litro de vodka con naranja, sí, sí, tampoco fue con una jaula inofensiva!). Si bien en un comienzo se observó un aumento en la capacidad de las ondas delta, similares con las fases mucho más profundas del sueño, fundamentales para un óptimo reposo, asimismo advirtieron un incremento de la actividad alfa de adelante, síntoma de alteraciones del sueño sueño… ¡Holly Cow! !
En resumen, el líder de la investigación, Christian Nicholas, relata que el alcohol en proporciones mayores, crea un sueño superficial y perjudica a las fases del reposo, aun equipara la sensación al día después con quien padece mal crónico, de ahí deriva la conocida “resaca” a la que se aúna la deshidratación etcétera, etcétera.
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